Sabías que un pequeño y microscópico insecto llamado ácaro “es tu fiel y peligroso acompañante durante las horas de sueño”. Este insecto se alimenta de escamas de piel humana y el lugar propicio para su proliferación suele ser tu colchón y almohada, pero, ¿cómo puedes eliminar los ácaros?
Los ácaros forman parte del grupo más antiguo de los primeros animales que aparecieron en la vida del planeta. Estos pasaron del ambiente acuático al terrestre adaptándose al hábitat.
Un colchón puede contener millones de ácaros microscópicos del polvo que pueden causar grandes problemas en la salud de los seres humanos y de los animales domésticos.
Los ácaros del polvo tienen gran preferencia de ubicarse en sofás, almohadas, colchones, peluches y alfombras, por la profundidad del relleno y la retención de la humedad.
En cuanto a la alergia al polvo puede presentarse dentro de la casa y en lugares cerrados. Vale destacar, que el polvo de la calle no contiene ácaros y sólo actúa como irritante.
Los síntomas provocados por la alergia a ácaros suelen ser rinitis, conjuntivitis, estornudos al levantarse y asma en algunos casos. Es por ello, que las personas que son alérgicos al polvo deben tener en cuenta una serie de normas de limpieza, para eliminar los ácaros de su entorno.
Algunas familias piensan que con lavar las sabanas una vez por semana solucionará el problema del ácaro del polvo, pero esto es incorrecto, ya que los jabones no matan a los ácaros del polvo porque viven realmente en colchones y almohadas, no en las sabanas o fundas de las mismas.
Por esta razón, se debe cubrir el colchón con protectores antiácaros y cubiertas antialérgicas para las almohadas ya que es la manera más simple de proteger el sueño.
Estos protectores atraparán ácaros existentes del polvo dentro del colchón y almohadas además protegerán contra las infecciones futuras del ácaro del polvo.
Otros tips para eliminar a los ácaros del polvo son usar un purificador de aire antialérgico. Abrir las ventanas y puertas del hogar diariamente para mantener ventilado el lugar.
Así como exponer sábanas, cobijas y ropa interior al sol. Es necesario que una vez al mes dejes que los rayos solares lleguen a tu colchón. Evita tener muchas alfombras en las habitaciones. Cambia al menos cuatro veces al año los filtros del aire acondicionado.
La clínica de la Universidad de Navarra recomienda evitar todo aquello que pueda acumular polvo. En niños alérgicos deben retirarse los juguetes de paño o peluche.
Las mascotas no escapan de los ácaros ya que, éstos se fijan en su piel y se alimentan de su sangre causando úlceras, picazón e infección.
Los tipos de ácaros que tienen los perros son sarna, ácaros del oído y caspa, inclusive puede transmitirse de la madre a los cachorros.
Es importante tener presente que cuando la mascota tiene ácaros pueden contagiar a los humanos.
Para cuidar a tus mascotas y protegerlas de los ácaros lava con agua y jabón sus cobijas y cama. Evita el uso de esteroides y cremas que no haya recetado el veterinario.